La Iglesia Católica advirtió ayer que “el autoritarismo, la imposición y la intolerancia... amenazan a la familia boliviana” y tienden a opacar los avances logrados en la sociedad en materia de inclusión, participación social y revalorización de las culturas.
El secretario general de la Conferencia Episcopal Boliviana, monseñor Jesús Juárez, en un mensaje a propósito de las fiestas de Pascua, reflexionó sobre la importancia de ejercer la libertad y cuestionó, por el contrario “la instrumentalización de grupos sociales e imposición de ideologías” que no condicen —dijo— “con la libertad de los hijos de Dios”.
Según la Iglesia, “el sistema democrático y estado de derecho de una nación deben garantizar el ejercicio pleno de los derechos y libertades fundamentales de personas y grupos sociales y no pueden ser arbitrariamente manipulados por visiones particulares en desmedro del bien común”.
Juárez reflexionó sobre la necesidad de que los valores cristianos, “junto a los avances de nuestra sociedad en la inclusión, participación social y revalorización de las culturas, no sean opacados por los sentimientos de confrontación, división, avasallamiento, autoritarismo, imposición, intolerancia y atropellos a la dignidad humana que amenazan a la familia boliviana”.
En el mensaje al país afirmó además que “los atropellos a la dignidad humana, el enfrentamiento fratricida, la inseguridad ciudadana, el narcotráfico, los asesinatos y toda violencia que provoca muerte, constituyen una grave ofensa a Dios”.
Situación
Gobierno • Atacó a la jerarquía de la Iglesia Católica en diversas oportunidades. El propio presidente, Evo Morales, recordó a sus líderes que su misión es orar y no hacer política.
Separación • A diferencia de la última Constitución, la actual no reconoce a la católica como la religión oficial del Estado. La Biblia fue sacada de los actos oficiales del Gobierno.
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