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viernes, 30 de mayo de 2014

se refiere LTD al "abrazo de las tres religiones" son las monoteístas judía, cristiana y musulmán que se dieron el abrazo en gesto cuya trascendencia sitúa el matutino en mensaje de unidad, todavía lejos de ser una realidad,más sobre el cual debemos seguir trabajando así se "artesanalmente"

No se debe olvidar que son los símbolos los que, para bien y para mal, han dado y siguen dando tanto poder a las creencias religiosas
Aunque opacada por la abundancia de malas noticias que a diario dan cuenta de los muchos focos de conflicto, violencia e intolerancia que mantienen a gran parte de la población mundial sumida en un estado de permanente zozobra, no ha pasado inadvertida la visita del papa Francisco a Jerusalén.
Es que, más allá de los criterios que suelen imponerse a la hora de valorar los acontecimientos, las pocas horas que Francisco pasó en esa región y, particularmente, en Jerusalén –un suelo que para las tres religiones monoteístas es “Tierra Santa”– estuvieron cargadas de un simbolismo cuya importancia trasciende, y con mucho, la que le da su contenido estrictamente religioso.
Para tener una cabal idea del significado del encuentro ante el Muro de los Lamentos del papa Francisco, el rabino judío Abraham Skorka y el líder religioso musulmán Ombar Abboud, basta recordar que las discrepancias teológicas, políticas y económicas entre las tres religiones han sido el telón de fondo de las mayores matanzas de los últimos siglos e incluso milenios. Aún hoy, no hay guerra en todo el Medio Oriente que de un modo u otro no esté relacionada con los odios que se fueron acumulando a través del tiempo.
Ha sido tanta la influencia que la Biblia, el Talmud y el Corán han ejercido a lo largo sobre judíos, cristianos y musulmanes, que sin ese factor religioso resulta imposible comprender la historia de gran parte de la humanidad. Y como esa influencia, para bien y para mal, sigue siendo enorme, resulta por consiguiente también imposible prescindir de ese factor si lo que se quiere es evitar que la historia se repita durante los años venideros sólo que con medios bélicos mucho más letales.
Muy conscientes de eso, Francisco, Skorka y Abboud han tenido la audacia de desafiar a los sectores más conservadores, intransigentes e influyentes de sus respectivas religiones en un gesto que por lo provocador que es no puede pasar desapercibido. No debe haber sido nada fácil para los tres líderes pasar por encima de siglos de distanciamientos y resentimientos, pero sobre todo de las corrientes adversas a ese tipo de expresiones de tolerancia que desgraciadamente son todavía demasiado fuertes tanto entre judíos como cristianos y musulmanes.
Si a los factores teológicos e históricos se suman los múltiples intereses políticos, económicos y militares que actualmente están en juego, y que se yerguen como los principales obstáculos para que la paz se imponga tras siglos de violencia, se multiplica el valor de una iniciativa que, aunque no sea más que en el plano simbólico, sienta las bases de un acercamiento entre las tres religiones monoteístas y los pueblos que las siguen. No en vano el papa Francisco ha reiterado en este viaje que la “paz no se puede comprar, no se vende. La paz es un don que hemos de buscar con paciencia y construir ‘artesanalmente’ mediante pequeños y grandes gestos en nuestra vida cotidiana”.
Es probable que si se compara el valor intangible de los símbolos y las palabras con la contundencia objetiva de las armas y la guerra, resulte difícil alentar muchas esperanzas en gestos como el “abrazo de las tres religiones”. Sin embargo, no se debe olvidar que son precisamente los símbolos los que para bien y para mal, siglo tras siglo, han dado y siguen dando tanto poder a las creencias religiosas.

domingo, 25 de mayo de 2014

histórico abrazo entre Francisco y Bartolomeo I en Jerusalen.los jefes de católicos y ortodoxos se unen y rezan el Padre Nuestro en la tumba de Jesús y la Resurrección.

El papa Francisco celebró este domingo unencuentro "histórico" con el patriarca ortodoxo Bartolomeo I en la iglesia del Santo Sepulcro, en Jerusalén, para sellar simbólicamente la unidad de los cristianos.


 El jefe de la Iglesia católica y el patriarca ortodoxo firmaron una declaración conjunta por la unidad de las dos iglesias casi 10 siglos después del cisma entre Oriente y Occidente.
El papa Francisco y Bartolomeo I, uno vestido de blanco y el otro de negro, se arrodillaron largamente ante la tumba de Jesús y el lugar donde resucitó, según la tradición.

50 años después
Los dos líderes religiosos fueron muy aplaudidos tras lo cual repitieron el gesto de abrazarse, tal como ocurrió hace 50 años entre Pablo VI y el patriarca Atenágoras, el 5 de enero de 1964.
En la declaración, de 10 puntos, Francisco y Bartolomeo se comprometieron a respetar "las legítimas diferencias, por el bien de toda la Humanidad".
Igualmente acordaron obrar para que "todas las partes, independientemente de sus convicciones religiosas, favorezcan la reconciliación de los pueblos".
El papa argentino, que visitaba por primera vez el Santo Sepulcro, resultaba visiblemente emocionado.
El acto, que inició con una hora de retraso, se concluyó con el rezo conjunto del Padre Nuestro.

lunes, 19 de mayo de 2014

con cuánto afecto fraternal y Fe y Sumisión a la Iglesia de Dios escribe Gastón Cornejo a propósito del retorno a casa del Pastor Tito Solari. nos relata el escenario en la Catedral Metropolitana repleta de creyentes y del sermón del Arzobispo. Gracias Gastón por compartir tan histórico momento.

Monseñor Tito Solari ha vuelto a su grey, a su Cochabamba querida, y los cochabambinos lo reciben alborozados aplaudiendo el retorno feliz de su pastor. Vuelve a su hogar, restablecido de temporales falencias pero enhiesta su alma cual bandera triunfante, presta a enarbolar sus selectos mensajes de santidad, humildad y amor.

Tuve la feliz oportunidad de asistir a su primera misa consagrada por él mismo en Cochabamba. Había que llegar temprano a la Matriz para lograr ubicación preferencial, para estar próximo a nuestro santo, al cristiano que más honramos en este tiempo de banalidad y frustración en valores humanos. Él es el hombre símbolo del mensaje de Jesús Dios, de la Iglesia renovada de Francisco Papa¸de la trascendencia espiritual de Leonardo Boff, del sacrificio de Salvador Romero y Luis Espinal, del mensaje profundo de Alejandro Gasset, Luis Lozada, Gregorio Iriarte, Miguel Manzanera y de tantos seres excepcionales que nos circundan y por los cuales merecemos llamarnos pueblo de Dios.

El enorme recinto catedralicio se llenó totalmente de fieles; mis ojos ubicaron al frente la Virgen Dolorosa y el apóstol Juan a los pies del Crucificado; a la espalda sentí la viva presencia de la Virgen Heroína, la de Hamiraya y la Coronilla. Muchos pequeños se preparaban para cantar salmos de gozo y alabanza. Cuando ingresó el Arzobispo rodeado de los suyos, todo el pueblo aplaudió de pie con los ojos húmedos de emoción y de gratitud al buen Dios que nos lo devuelve con el mismo rostro de simpatía y bondad. Incienso, oraciones, ritos simbólicos de significado religioso. Indudable, en la atmósfera había penetrado el Espíritu Santo.

En sus palabras, fue remarcable su agradecimiento a Dios, a los varones de la Iglesia, a las oraciones de todos los fieles. Yo en mi interioridad le agradecí desde el fondo del alma porque sentí el amor limpiando mis nubes negras, la sola presencia de Solari limpió mi corazón de tormentas. Todos los congregados respiramos ese cálido afecto. Finalmente la paz, la paz en el espíritu y los abrazos entre los presentes y los ausentes.

Cuánta diferencia vivencial con otros eventos celebrados en el mismo recinto religioso, el aniversario patrio, el departamental, la misa en favor de algún célebre político o cívico donde los asistentes se congregan más por curiosidad que por afecto. Quizá sólo en dos oportunidades se llenó la Catedral completamente y en los cuales el pueblo asistió conmovido de sentimiento: en las defunciones del General Carlos Blanco Galindo y del Gral. René Barrientos Ortuño, siendo distantes los personajes en el tiempo y en valores humanos personales, pero el pueblo acogió su partida con respeto y sentimiento antes de que entraran a la eternidad y a la historia.

Yo escribí a Monseñor representando a la Unión de Poetas y Escritores, informados de su mejoría en salud. Todos sus miembros pidieron le envíe sus saludos y los deseos de ventura, salud, sus oraciones para que Dios lo bendiga. Él respondió agradecido, y a propósito de la institución afirmó: “Es muy precioso el ministerio de cantar la belleza y de embellecer el mundo”. 

Yo le respondo ahora: ¡Su ministerio de amor bendice nuestras vidas, nuestra Cochabamba y la Patria de nuestros amores! Gracias por su testimonio y gracias por existir Arzobispo Tito Solari.

domingo, 11 de mayo de 2014

de regreso en casa, el Pastor agradeció todas las muestras de afecto durante la enfermedad que padeció. conmovió su sermón junto a las autoridades y al pueblo de Cochabamba. en la foto Tito Solari celebrando

Solari comenzó  el sermón religioso agradeciendo a las familias, autoridades políticas, parroquias, grupos de oración, pastorales, catequistas y congregaciones por las oraciones ofrecidas a favor de su recuperación. Asimismo, dedicó uno especial  a “sus hermanos obispos” de Cochabamba, el resto del país y el Cardenal, cuya “cercanía” y oración  sintió desde Italia.

“Siento la necesidad, el deber y el deseo de agradecerles de todo corazón estas oraciones y esta cercanía y ofrecer esta eucaristía dándole gracias al Señor”, indicó tras ponderar el trabajo de los medios de comunicación, quienes fueron el “canal” que mantuvo la conexión entre su persona y los fieles.
Solari dedicó gran parte de la homilía a valorar el poder de la oración, la cual indicó sirvió para unir a Dios, el pueblo y su persona durante su enfermedad. “¿Qué nos dice esta experiencia de comunión entre ustedes y la oración por el pastor? Nos dice que somos familia”, dijo al respecto.
Asimismo, pidió a los creyentes católicos orar por las vocaciones, las cuales son la “primera necesidad de la Iglesia”. Con una sencilla túnica blanca y amarilla, que representa los colores de la Iglesia, el monseñor Solari también instó a cultivar la fe y la caridad. En la misma línea planteó un desafío, traducir ambas en obras materializadas en la solidaridad. “La fe si no se traduce en obras está muerta, si la caridad no es real se queda vacía. Nuestra Iglesia, fe y caridad tienen que expresarse en la solidaridad”, resaltó.
Al acto asistieron el alcalde, Edwin Castellanos,  representantes del Concejo Municipal, Asamblea Legislativa Departamental y otras entidades académicas y empresariales. Castellanos resaltó el mensaje del monseñor.
Afronta una pancreatitis
El monseñor Solari partió a Europa en febrero de 2014 para cumplir funciones religiosas, donde  sintió molestias y fue internado en un hospital de Madrid. Posteriormente fue  sometido a estudios médicos que le diagnosticaron pancreatitis aguda  y descartaron la presencia de cáncer en su organismo.
Tras dos meses de tratamiento y reposo junto a su familia en Italia, retornó a Bolivia el 8 de mayo. En la ocasión un centenar de feligreses entre jóvenes, religiosos y laicos recibieron al “pastor” de Cochabamba con flores, música y expresiones de agradecimiento. Monseñor Solari presentó su renuncia al arzobispado ante el Vaticano. Anunció que espera la respuesta del papa Francisco. Entre tanto, retomará sus funciones religiosas con prudencia puesto que cuenta con un tratamiento “exigente y largo”.