09 de Diciembre de 2009, 10:16am ET
LA PAZ (AP) - Los obispos católicos tendieron la mano al presidente Evo Morales tras su arrollador triunfo electoral del domingo, pero el gobierno respondió con la afirmación de que las diferencias no son con la feligresía sino con sus jerarcas.
El ministro de la Presidencia, Juan Ramón Quintana, dijo durante una rueda de prensa que las "discrepancias no son la Iglesia Católica sino con algunos jerarcas", pero destacó el saludo de los obispos.
La Conferencia Episcopal de Bolivia envió un mensaje de felicitación a Morales a quien deseó "los mejores éxitos" en su nueva gestión que iniciará el 22 de enero y destacó la vocación "pacifica" de los bolivianos para manifestarse en las urnas.
El cardenal Julio Terrazas se ha mostrado crítico a las políticas de Morales y ha sostenido discrepancias públicas con funcionarios los que acusaron al purpurado de alinearse con la oposición conservadora.
La relación entre el Ejecutivo y la Iglesia Católica comenzó a deteriorarse al inicio del mandato de Morales con una iniciativa para suprimir la obligatoriedad de enseñanza del catolicismo en colegios de esa confesión.
En un momento de la polémica, las autoridades llegaron a decir que la misión de los obispos es de alivio espiritual, después que el cardenal Terrazas manifestara que el gobierno no mejoró la situación de los pobres.
Los obispos dijeron entonces que su misión no se limitaba al ámbito espiritual sino a velar por la mejora en las condiciones de vida de las personas.
La Constitución aprobada a principios de año ya no destaca cierta primacía a la fe católica, reconoce igualdad a todas las iglesias y garantiza la libertad de creencias espirituales incluyendo los ritos indígenas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
invitación a comentar lo publicado. la única restricción está en un lenguaje pulcro, directo, sin insultos ni palabras soeces que dañen la dignidad