hubo un sacerdote que desobedeciendo a la Iglesia se prestó a una burda ceremonia religiosa. el pueblo concurrió a la Catedral en cambio.

Oruro es un pueblo católico:

Celebración del solemne Te-deum se impuso ante la ceremonia ecuménica del gobierno

Oruro es un pueblo esencialmente católico, y ello quedó demostrado este miércoles 10 de febrero, con la celebración del solemne Te-deum en la Iglesia de la catedral, frente a la ceremonia ecuménica convocada por el gobierno y que se llevó a cabo en forma paralela en ambientes de la prefectura de Oruro. A esta última ceremonia asistió el presidente Evo Morales Ayma y su comitiva; además de autoridades de la prefectura, los parlamentarios y representantes de las diferentes iglesias asentadas en Oruro. En tanto que otra parte de las autoridades, entre ellas el alcalde municipal Edgar Bazán Ortega, los concejales munícipes, autoridades del poder judicial, la corte departamental electoral y una buena asistencia del pueblo orureño, asistió a la catedral para la celebración eucarística presidida por el Obispo de la Diócesis de Oruro, monseñor Cristóbal Bialasik. En la oportunidad monseñor Bialasik recordó y resaltó la valentía de quienes hace 229 años enseñaron al pueblo el camino de la libertad y pidió a Díos guiar a los actuales gobernantes, guiarles con ese mismo espíritu. Ya casi al finalizar la celebración lamentó que el gobierno solo haya creado confusión entre el pueblo con la realización de la denominada ceremonia ecuménica, que tenía más un objetivo político antes que de celebración religiosa. Señaló que un encuentro de esta naturaleza es importante, siempre y cuando se lo haga de corazón y con el consenso de todas las iglesias en Oruro. "Esta ceremonia debía realizarse en un lugar neutral y no en la prefectura, mucho con la presión de parte de los gobernantes como se ha hecho en esta oportunidad. Pedimos al gobierno que respeten la libertad religiosa del pueblo y no la manipulen de este modo", aseveró. Por último, el obispo de la diócesis de Oruro, monseñor Cristóbal Bialasik, lamentó que un sacerdote cuyo nombre no reveló, se haya prestado a asistir a esta ceremonia, en clara muestra de desobediencia a los mandatos de la Diócesis de Oruro. Pese a todo, la fe del pueblo católico orureño se impuso y el solemne Te-deum se cumplió como todos los años, con una nutrida concurrencia que homenajeó también de este modo, a los 229 años de la gesta libertaria del 10 de febrero de 1781.